Una de las partes más bonitas de estos marcapáginas es que cada uno tiene un colgantito, como pueden ver en la foto de abajo:
Por cierto, ya se va acercando cada vez más la jornada de intercambio de marcapáginas en el museo Frederic Marès (Barcelona). Yo estuve hace dos años y repito en esta ocasión. Si alguno de ustedes se pasa por allí, que no deje de saludarme.